Descripción
Ubicado inmejorablemente por múltiples motivos, el Pazo Lamelas es, sin duda alguna, una auténtica joya histórica situada en las Rías Baixas. Abrazado en la totalidad de su perímetro por un tradicional muro de mampostería, atesora en su interior tres hectáreas donde la huella de la historia gallega permanece indeleble. Elevado sobre una preciosa atalaya, erige su sobria y contenida estructura, desde el Siglo XVII, mirando cara a cara al océano Atlántico, sabedores ambos de la perfecta simbiosis que protagonizan, nutriéndose mutuamente... Las Cíes asemejan una ensoñación desde este paraje único en el mundo, protagonizando esa instantánea capaz de captar la belleza cuando esta se convierte en algo indescriptible. El letargo solar a la caída de la tarde, dibuja murales de luz sobre el gris atemporal del granito que lo compone.
Construido por orden de los hermanos Juan, Gregorio y Manuel de Puga y Armida, del linaje de los Armida fue a posteriori, ya en el 1.852, adquirido por el presbítero Don Benito Dominguez De Luna.
El edificio se creó con planta irregular y tres pisos de altura. La peculiar ventana esquinada de su fachada principal es custodiada por el escudo nobiliario con la simbología correspondiente a las familias Armida y Puga.
Solo el tiempo dirá cuál es el futuro de este lugar, digno representante de la cultura gallega; un lugar dónde cada piedra habla del pasado, donde cada estancia y cada rincón conservan la esencia de un tiempo pretérito del que aprender y disfrutar en el presente... Pazo Lamelas permanece ahora, ajeno al mundo exterior. Silente observa el devenir de la vida en el persistente paso de aquellos peregrinos que rumbo a Compostela, se adentran en estos hermosos y únicos parajes. El Camino Portugués lo refrenda en la actualidad como un referente histórico- cultural que debería abrirse al mundo.